Priorizo la proximidad de las fibras textiles, procesos de producción inocuos, condiciones laborales dignas y el bienestar animal.
En mis tejidos únicamente utilizo fibras 100% naturales, especialmente la lana por motivos culturales y medioambientales, además de por sus excelentes propiedades; el lino que cuenta con una larga historia de producción en Asturies, tal y como atestiguan los diferentes topónimos que dan cuenta de su importancia histórica; y la seda, uno de los materiales más delicados del sector textil.
Siempre que es posible, tejo con fibras de proximidad de proyectos locales y/o de producción orgánica. Y con la lana de mi propio rebaño de oveja xalda, la raza autóctona asturiana de origen celta que fue utilizada durante miles de años en el territorio de Asturies, y que hoy se encuentra en peligro de extinción.
La lana es una fibra suave y esponjosa conocida por su capacidad para mantener el calor y regular la temperatura corporal. El lino es una fibra fuerte y resistente caracterizada por su capacidad de absorber la humedad y mantener la frescura. Por su parte, la seda es una fibra suave y lisa conocida por su suavidad y brillo, con propiedades que la hacen ligera y transpirable.
Lana de proximidad
Pensamos que podemos lograr una lana de mayor calidad, sin causar sufrimiento a los animales y reduciendo al mínimo el impacto en el medio ambiente, sin comprometer la suavidad.
La mejor lana es la que está hecha de la mejor manera. La lana que ofrece una sensación de plenitud cuando la tocas, la hueles, la tejes y la usas comienza en la propia cría de las ovejas y, posteriormente, con una cuidadosa selección de tipos del hilo.
Fibras sostenibles
Todas las lanas de Paz Mesa son libres de mulesing y de tratamiento superwash.
Apostamos por trabajar, siempre que es posible su obtención, con fibras orgánicas, puesto que solo así tenemos total garantía de que el producto final cumple con todas las condiciones que consideramos necesarias para crear textiles de alta calidad y de forma ética y solidaria.